Estoy preparándole un regalo a mi hijo precioso, y me encanta!

Hago foto y os cuento ;)
Balance pesil:
- ¿Kilos al quedarme embarazada? 54 kl.
- ¿Kilos al dar a luz? 72 kl (sí, verídico)
- Engorde final: Uhmmmmmmmmmmmmm... pues sí, 18 kilazos.
Cómo vamos? Pues vamos a ver... a los 15 días de la cesárea había perdido 12. Pesaba 60 kl.
No estaba mal, pero aún me queda un largo recorrido... pero claro, es un poco pronto no..? tengo excusa!
A día de hoy, aún proponiéndomelo todas las semanas, no me he puesto a dieta.
Pudiéndome además hacerme cositas sanas y sabronas con mi super olla! (especial cariño que la tengo, la compré y acto seguido me ingresaron)
Sin hacer nada, tras el veranito, otros 3 han salido volando...
Peeeeeeeeeeero... cómo me quito los 3 restantes? cuál es la mejor forma? hacer dieta estando en casa es duro, corto por lo sano? voy poco a poco?
No puedooooooooooooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Peso 57 kilos. Empiezo la cuenta atrás.
Lunes 25 de Octubre:
- 1 café con leche. Y azúcar.
- 6 galletas nada sanas.
- Bol de aceitunas.
- Bol de patatas fritas.
- Cerveza y media.
- Pechuga de pollo (pero no preparada de forma muy sana diría yo...) acompañado de mayonesa.
- Pan. Claro. Y bien rico.
- Cero agua.
*Punto a mi favor: las patatas y aceitunas compartidas.
Así que... así estamos.
¿QUÉ HA SIDO DE MI PERSONA???????????
(Y sí, tengo una faja).
Cuando desperté ya se habían llevado al niño y ya me habían cosido.
Me sacaron fuera para recuperarme. Como era muy tarde ya no quedaba nadie por ahí, así que me quedé en una sala tumbada en la camilla al lado de un montón de camillas vacías. Y claro me puse a llorar.
¿Por qué?
- Por las hormonas.
- Porque me había asustado muchísimo y descargaba el estrés.
- Porque me sentía culpable. Culpable de no haber disfrutado del nacimiento de mi hijo y de que sólo quería que me lo sacaran para que me durmieran.
Así que... me vieron tan mal que me dejaron más tiempo abajo, más tranquila, terminando de llorar lo que tuviera que llorar. La cicatriz me dolía por el lado derecho.
Al subir, aún en el pasillo se acercó mi chico con los ojos rojos de llorar: "Es precioso, es perfecto, no se parece a ti!!"
(quiso hacer una coña, ya que yo era bastante feucha cuando nací, y siempre me decía que: "Pobre niño, más vale que no salga a su madre" :-P)
Pero yo no estaba para coñas jope..., lo siguiente que le dije fue: "No se si voy a poder pasar por ésto otra vez". Me contestó con un "Vale", supongo que entendió que no quería hablar del tema.
Pero entré en la habitación (llorano como una magdalena!!!!) y lo vi. Con mis padres y mis suegros, todos llorando, felices...
Todo cambió, ya no me dolía, ya no me importaba! volvería a pasar por ello una... y otra... y otra más... y todas las veces que hicieran falta, era mi hijo!!!!!!!!!!! yo le quería con toda mi alma y durante la operación se me había olvidado... cómo pudo ocurrir eso!!!!!!!!!!!!
Sólo de recordarlo lloro. Lo digo en serio!
Sano, bello, alerta, asustado, y me necesitaba.
No se puede explicar. No se puede describir. Sólo se sabe cuando se tiene un hijo. Imposible redactar esa sensación y ese sentimiento. IMPOSIBLE.
Todo mereció la pena, y en ese momento supe que ya me podía morir tranquila!